A Lily Allen no le agrada escuchar su propia música
Sorprendentes fueron las declaraciones que la cantante inglesa Lily Allen, hizo en exclusiva para la revista GQ en su edición británica. Y es que ella ha afirmado categoricámente, que no le gusta cuando se encuentra en una discoteca y de repente empieza a sonar una canción suya. Esta es una reacción que difinitivamente nadie podría esperarse; ¿sucederá lo mismo con otros músicos? ¿O será ella la única excepción en el tema?
Al respecto, estas fueron las palabras de Lily para la entrevista:
«Generalmente si estoy en una discoteca y ponen mi música, lo que hago es buscar la mesa más cercana y esconderme debajo de ella. Así es como suelo encararlo. Es gracioso, porque en algunos sitios creen que lo que deben de hacer cuando alguien como yo entra en su local es poner su música. Supongo que yo reaccionaré de muy distinta manera al resto de la gente, porque yo me quedo petrificada e intento esconderme. Estoy segura de que mucha gente se subirá a la mesa, bailará y se sentirá genial. Pero yo no puedo hacer eso».
No obstante lo anterior, todo parece indicar que Lily no tendrá mucha suerte al salir de copas por los bares ingleses. Recientemente, su álbum «Sheezus» ha logrado posicionarse como el número 1 en las mejores listas de hits en el Reino Unido. Un logro considerable, si tenemos en cuenta que se mantuvo por un tiempo alejada de su carrera musical. Tal parece pues, que la artista ha vuelto para arrasar con todo a su paso; incluso aunque pueda sentir algo de vergüenza.
Y tú, ¿qué es lo que opinas acerca de este comportamiento? La verdad es que si uno lo piensa bien, puede ser un poco comprensible que los cantantes puedan sentirse cohibidos, cuando no se esperan escuchar su propia música en cualquier lugar.