Dawn FM: lo peor de The Weeknd
Los viejos conocidos de la música de Abel Makkonen Testafaye, el nombre real del artista The Weenkd, ya no se sorprenden cuando el artista salta a un nuevo género tras cerrar una etapa con su anterior álbum. Dawn FM no es una excepción, aunque sí algo diferente al resto. No se siente una obra completa, sino un álbum de transición, de «entretiempos», si lo prefieren.
Si en Blinding Lights The Weeknd hacía una tímida incursión hacia un sonido más ochentero, menos explícito, sin referencias al consumo de sustancias ilegales y a la «mala vida«, Dawn FM es la culminación de ese salto. Un álbum que perfectamente podría haberse publicado hace 40 años (salvando la factura técnica, que es impecable como nos tiene acostumbrados) y que, sin embargo, nos sorprende en 2022 con un estilo claro. Un álbum conceptual basado en la idea de una cadena de radio que la persona está escuchando en el camino a su propia redención.
Es algo que el artista ha tratado en otras ocasiones, pero esta vez lo hace de una forma más optimista, con menos melancolía. Si sus skits (los fragmentos cómicos, satíricos o hablados entre canciones, muy característicos en los álbumes de hip-hop de los 90) e interludios solían estar monopolizados por historias de corazones rotos, traiciones y la derrota del ser humano ante sus deseos más primarios, aquí se contruye un ideario diferente. Son constantes las referencias bíblicas, los cortes de estilo radiofónico que anuncian que la vida es corta y puede acabarse en cualquier momento, así como la idea de que es posible salir del agujero y que ir a terapia no es nada de lo que avergonzarse.
Abel se abre a sus fans sobre sus problemas de compromiso, los traumas que arrastra desde la infancia y las ganas que tiene de dejar su pasado a un lado y evolucionar como persona. Dejar de sentirse perdido en el camino de encontrarse a sí mismo. La idea es promedora. La factura técnica, también. Los álbumes conceptuales se encuentran entre mis favoritos, personalmente. Entonces… ¿Qué falla?
¿Qué falta en Dawn FM?
En principio, todos los ingredientes para ofrecer una experiencia única están ahí… Pero no se siente como un trabajo finalizado. Muchas de las canciones suenan repetitivas y parecidas entre sí. Los estribillos se repiten hasta 3 veces seguidas mientras las partes instrumentales (bastante largas en algunas canciones) no lucen nada. Resultan genéricas.
El propio The Weeknd ya avisó que iba a rotar hacia un contenido más comercial porque aspiraba a llegar a un público masivo. Y lo logró, por cierto. De hecho, ya en Trilogy hace más de 10 años auguraba el alejamiento de sus fans iniciales cuando llegara a las masas con un tipo de contenido más mainstream. Ha formado parte de su trayectoria musical y lo dejaba por escrito en sus temas: siempre ha sabido que debía traicionarse a sí mismo para llegar a lo más alto. Esa no es la queja, sino que este álbum tampoco parece estar destinado a satisfacer a su nuevo público objetivo. Best Friend, Out Of Time, I Heard You’re Married, Don’t Break My Heart… Literalmente son canciones que podrían llevar la firma de cualquier artista indie de R&B/pop en SoundCloud.
El problema es que The Weeknd en este intento conceptual (Dawn FM = Amanecer FM) de dejar atrás todo lo que el propio The Weeknd representa, no ha sabido ofrecer nada a cambio. Si le quitas el sexo sin compromiso, detestar la fama pero desear el éxito a cualquier precio, ser alguien inseguro que oculta la sensación de no ser suficiente con conquistas amorosas y sustancias estupefacientes y la eterna lucha entre ser alguien que sufre por amor y alguien que causa sufrimiento por desamor en los demás por no saber lidiar con sus propias emociones… ¿Qué te queda? Te queda The Satrday, The Snday o the Mnday. Te queda un artista genérico más de los que tienen un éxito que suena en todos lados y luego pasan al olvido más absoluto.
La buena noticia es que siento que esto es solo un peldaño, un trabajo entre cambio de ciclos en un momento en que el mundo entero ha quedado paralizado en un limbo. No creo ser el único para el que los dos últimos años han pasado como si nada hubiera sucedido. Como si el tiempo se hubiera congelado y fuéramos los mismos que antes de la pandemia, solo que dos años más viejos. Sospecho que el próximo álbum vendrá más cargadito de novedades y buscando un sonido nuevo ahora que ya se ha rebañado y más que rebañado en el estilo ochentero del que tanto beben sus dos últimos proyectos.
Take My Breath
Probablemente la mejor canción del álbum. La versión que se publica es Youtube es uno de esos típicos radio edits que acortan las canciones más largas y con extensas partes instrumentales a una versión más comercial de entre 3-4 minutos.
Phantom Regret by Jim
Es la «canción» que cierra el álbum, aunque más bien es un interludio largo en forma de narración que corre a cargo de actor y humorista Jim Carrey. Es la culminación y cierre del disco, tanto literal como figuradamente. Reúne en una sola narración la condensación de todo el concepto de Dawn FM. Aquí las referencias bíblicas pasan a ser citas literales extraídas de la Biblia, cerrando incluso con la versión inglesa de La Paz Sea Contigo con que se despiden las eucaristías en español.